Estudios de Motivación y Satisfacción en empresas ó cómo contribuir el éxito personal de sus trabajadores

Clima laboral Openmet People
Estudio motivación laboral

En el último año, en Openmet, siguen aumentado las solicitudes de estudios de Motivación y Satisfacción en empresas. Pero, ¿cuál es la razón de una empresa para motivar a sus empleados? y, ¿cómo puede medir estos resultados?

En este artículo ofrecemos algunas claves para entender la importancia de este tipo de estudios de motivación y satisfacción.

Artículo publicado en la revista especializada “Equipos y Talentos”. Raquel Martínez.

A la hora de potenciar la satisfacción de las personas, uno de los bienes más preciados es la conciliación laboral
En toda relación entre dos adultos, lo más saludable es que las dos personas implicadas vayan alternando en sus roles: que, en diferentes momentos, ambos sean protector y protegido, consolador y consolado, guía y guiado, adulto y “niño”… en definitiva: rescatador y rescatado.

Lo mismo que pasa en la pareja viene a pasar en la sociedad. Lo ideal es que podamos vivir en un continuo intercambio de posiciones, con los demás y con la propia sociedad en general: dar y recibir; o, lo que es mejor, recibir para poder dar.

Sin embargo, en el momento actual tenemos demasiadas trabas y recortes como para ocupar la posición del protegido.

¿Quién se siente con los recursos suficientes como para tirar hacia delante y, además, aportar algo a la sociedad económica actual?

¿Quién no teme que los recortes lo acaben “recortando”?

¿Quién de nosotros necesita que le toque ser rescatado?

En muchos adultos permanecen deseos contradictorios y sentimientos ambivalentes. Quiero ser responsable de mi vida, pero quiero que alguien se haga cargo. Quiero crear, pero no quiero perder. Quiero liderar, pero no puedo aguantar las críticas. Quiero arriesgar, pero no tengo seguros…

Tenemos el vértigo añadido de estar continuamente cayendo, deslizándonos, resbalando y bajando por una rampa a la que no se le ve fácil fin.

Y mientras bajamos –y escuchamos que no nos podemos quejar mucho porque otros bajan mucho más y mucho más rápido que nosotros–, nos recortan servicios básicos… y según seguimos bajando, nos suben el IVA, y puede que algunos subamos un poco porque nos promocionan o nos suben el sueldo…, pero volvemos a bajar porque nos suben impuestos… y seguimos bajando y nos endeudamos con deuda pública, y bajamos más viendo impasibles cómo nos meten en un contrato para salvar la banca; y seguimos bajando y nos involucran en un pacto para ser rescatados… así qu llego a la conclusión de que sólo podemos ser rescatados por nosotros mismos, o pagando a plazos a otros para que lo hagan.

Ahora, la clase media no podemos continuar el intercambio con la sociedad: a veces adulto (que saca adelante, aporta, crea y enriquece), a veces niño (protegido, cuidado, ayudado, guiado): ahora, por arte de banca, tenemos que ser rescatadores, de nosotros mismos y de lo que se nos viene encima.

Es por esta razón que la empresa cobra un papel importantísimo en la visión de la época actual.

La “organización nos organiza”, nos ordena para un fin y es una potencial generadora de esta relación que actualmente no nos proporciona la sociedad a gran escala.

¿Puede la empresa actual contribuir al éxito personal de sus trabajadores y de la sociedad (de forma indirecta a través de ellos)?

Y si es así… ¿Cómo podría hacerlo? ¿Sobre qué resultados se justifica?

La respuesta es que sí, que la empresa puede –añado: ¡si quiere!– convertirse en motor de cambio de la sociedad.

Y lo más importante: ¿Cómo puede hacerlo? Convirtiéndose en su protector, su guía, su contenedor.

La empresa puede ser un rescatador; no por la nómina a final de mes, sino como un soporte vital, como una palanca para activar la propia fuerza y la propia vida y, por efecto colateral, la vida de familiares y amigos que, al fin y al cabo, son la sociedad que tanto nos preocupa.

En el último año, en Openmet, siguen aumentado las solicitudes de estudios de Motivación y Satisfacción en empresas. Por esta razón, podemos ofrecer un marco con los indicadores que tienen mayor correlación con la “felicidad laboral”.

Vinculados con la motivación: el reconocimiento del trabajo bien hecho, la comunicación, la transparencia de la organización, la identificación con la cultura y los valores de la empresa y los planes de carrera son puntos decisivos.

Por otra parte, a la hora de potenciar la satisfacción de las personas, uno de los bienes más preciados en el puesto de trabajo es la conciliación laboral (asignatura pendiente en España y potenciada por la disminución de plantilla en muchas empresas). En la misma línea, destacaríamos las relaciones con compañeros y el apoyo percibido.

Es por esto que, los empresarios, gestores y técnicos que tenemos la suerte de trabajar, tenemos las claves y la posibilidad de mejorar la sociedad desde la parte que nos toca: haciendo que las personas que trabajan con nosotros estén más motivadas, más satisfechas,¡más felices!… porque, como decíamos al principio, es necesario estar cuidado y recibir para poder cuidar y poder dar.

Cuando pienso en esto lo hago como técnica de recursos humanos, como gestora de equipos…, pero pienso en el comentario de mis jefes y de los jefes de toda España:

“Si yo tuviera una escoba… ¡Cuántas bancas barrería!”